Las titulaciones relacionadas con informática son muy populares debido a la gran demanda de profesionales en toda Europa. Debido a la gran demanda de estos grados, algunos programas en los Países Bajos cuentan con una selección denominada Numerus Fixus, lo cual significa que hay un cupo de plazas limitados, mientras que otros son más accesibles.
Es importante saber que una carrera titulada “Ingeniería Informática” no es tan común en otros países, por lo que es fundamental fijarse en el contenido de la titulación, no solo en el título. En los Países Bajos, es posible estudiar informática en una universidad de ciencias aplicadas, con clases prácticas y experiencia laboral, o en una universidad de investigación, como es el caso de Belén, nuestra embajadora estudiantil que nos ha escrito este blog sobre sus experiencias, desde su solicitud hasta su primer año en la ciudad de Groningen.
Mi nombre es Belén Hidalgo, soy de Zaragoza y tengo 19 años. En septiembre de 2023 empecé la carrera de Computing Science en Groningen, la ‘ciudad de estudiantes’ por excelencia de Holanda.
Decisión de estudiar en una universidad del extranjero
Tomar la decisión de irte a una universidad en el extranjero nunca es fácil. En mi caso, ya sabía desde hacía tiempo que quería irme a estudiar fuera de casa; sin embargo, mis horizontes se limitaban a la frontera nacional. Siempre que me preguntan por qué descubrí Groningen digo lo mismo: ‘por casualidad’. Una conocida a la que no veía desde hacía años estudia en Holanda y, paseando un día por Zaragoza, nos cruzamos y me lo contó. En ese momento fue cuando la idea de marcharme de España se volvió real.
Selección de universidades
Tuve entrevistas con distintas agencias acerca de universidades a nivel global; miré tanto en Europa como en América, sin llegar a cerrar ninguna aplicación porque no lo veía claro. Fue entonces cuando, buscando en internet, descubrí a Kathryn. En seguida nos pusimos manos a la obra. Algo que tenía a mi favor era que tenía claro qué quería estudiar. Me encantan las matemáticas, pero no desde un enfoque teórico sino más práctico, así como la resolución de problemas. Sumándole que, aunque no sabía programar, me fascinaba la idea, no era difícil escoger Computing Science o Artificial Intelligence, mis dos opciones principales.
Miramos en todas las universidades holandesas que ofrecían estos grados en inglés. Tras muchos webinars, me decanté por Leiden y Groningen. El grado de Leiden no era numerus fixus, por lo que entré sin pruebas previas, pero el de Groningen (mi opción principal) sí. Por la crisis de alojamientos, las plazas de la residencia donde me he alojado este año abrían antes que la publicación de los resultados de las pruebas de entrada. Yo me arriesgué y reservé mi plaza en ese momento.
Algo a tener en cuenta es que en las residencias de estudiantes puedes estar como máximo doce meses. En marzo de este año ya empecé a buscar un apartamento para el próximo curso; sin embargo, amigos míos lo dejaron para el último momento y ahora van a empezar segundo de carrera sin tener dónde quedarse.
Holanda, un país lleno de oportunidades
Holanda es un país impresionante, especialmente si estás estudiando. Las universidades tienen un nivel similar a las británicas, pero la matrícula para estudiantes europeos es considerablemente más baja.
Además, el gobierno proporciona bastantes ayudas a los universitarios. Para empezar, si estudias a la vez que trabajas (un mínimo de 32 horas al mes), te dan unos 400€ mensuales aparte de lo que ya cobras, y no tienes que pagar el transporte público. Además, si tu alojamiento cumple una serie de requisitos, el gobierno cubre aproximadamente 200€ del alquiler.
Sistema educativo
La universidad de Groningen se encuentra entre las 100 mejores a nivel mundial. El sistema educativo es muy distinto al español y el enfoque mucho más práctico. La carrera tiene tres años, por lo que el contenido de los cuatro años españoles se encuentra comprimido en tres, con tres asignaturas cada bloque. En el caso de Computing Science, una es de programación, otra de matemáticas y la tercera de hardware. A diferencia de España, es necesario que en el primer año consigas 45 de los 60 créditos dedicados a dicho curso (en otras palabras, puedes suspender como máximo 3 asignaturas). Si no, no puedes matricularte en ninguna carrera de esa facultad durante los próximos dos años. Esto es algo que hay que tener muy presente a lo largo del curso.
Dentro del sistema educativo, se encuentran los mentores y teaching assistants (TAs). Ambos son estudiantes de cursos superiores.
Los mentores se encargan de ‘guiar’ a grupos de primer año en sus primeros meses como universitarios.
En cuanto a los TAs, cada asignatura tiene clases magistrales impartidas por el catedrático a cargo de esa disciplina, tutoriales impartidos por TAs a grupos más pequeños en los que vuelven a explicar los conceptos de la clase magistral así como laboratorios impartidos también por TAs y, en el caso de mi carrera, dedicados a responder dudas acerca de los deberes.
Una de las cosas que valoro es la importancia que le dan a las valoraciones del alumnado; al acabar cada bloque podemos dar nuestra opinión acerca de varios aspectos de cada materia y, basándose en dichos comentarios, hacen cambios en el currículum, profesores y material proporcionado.
Las instalaciones y los equipos de trabajo son de última generación, y están en constante renovación. Por ejemplo, en Groningen sólo hay un edificio algo anticuado y está en proceso de demolición mientras que construyen uno completamente nuevo.
Vida en Groningen
Como ya he mencionado, Groningen es la ciudad estudiantil holandesa por excelencia. Es la que tiene mayor porcentaje de estudiantes (muchos de los cuales internacionales) por lo que la vida gira en torno a ellos y a las bicis.
Antes de empezar el curso escolar, hay dos semanas introductorias organizadas por estudiantes. Yo fui a ambas y la verdad es que no me arrepiento en absoluto. Creo que nunca había conocido a tantísima gente de orígenes tan distintos en tan poco tiempo.
Se te ofrece la oportunidad de unirte a asociaciones de estudiantes de todo tipo desde la carrera o deportes hasta viajes y tanto los bares como la vida nocturna son dignos de la cantidad de gente joven que hay. Hay varios festivales a lo largo del año y la entrada a todos los clubes es gratis.
Sin embargo, el nivel de vida también es más alto. Los primeros días que estuve en Holanda me llevé un susto tremendo, pero una vez que empecé a ir al supermercado regularmente y a saber qué comprar y dónde los gastos se estabilizaron. Además, tres días a la semana hay un mercado de productos frescos en una de las plazas principales donde los precios suelen estar bastante bien.
Tampoco hay que olvidarse del clima; a mí me lo habían repetido incontables veces pero yo creía que no me afectaría. Y sí, claro que afecta. Los pocos días soleados toda la ciudad sale a la calle para aprovechar esos escasos rayos de sol y el invierno puede resultar duro, sobre todo yendo en bici. Algo que me sorprendió bastante fueron los horarios. Prácticamente todos los comercios abren los siete días de la semana, pero no esperes encontrar ninguno abierto después de las cinco o seis de la tarde.
En conclusión, no me arrepiento para nada de haberme ido a Groningen. Creo que he crecido como persona, me he vuelto más independiente y ha sido y es una experiencia muy enriquecedora. Por supuesto que he tenido mis momentos peores pero, si pudiese volver atrás, tomaría la misma decisión.
Si estás inseguro acerca de irte a estudiar al extranjero, mi consejo sería que, si lo que te impide es el miedo, adelante. Tampoco temas equivocarte, tienes toda la vida por delante.
Desde Edukonexion, ayudamos a estudiantes elegir su mejor camino hacia las universidades en el extranjero, tanto si quieres estudiar informática como otra carrera, en Holanda u otro país, y preparar una solicitud que destaque.
Sin olvidar que hemos visitado casi todas las universidades en Holanda, algo que nos ayuda a dar consejos muy válidos según tus preferencias.
¡Te esperamos!
